Luz verde a las obras de S’Aigo Dolça, el único equipamiento que hará Hila en dos legislaturas
Las nuevas piscinas de El Terreno costarán 8,5 millones y se prevé que las obras acaben en el primer trimestre de 2023
El complejo polideportivo contará con piscina cubierta, gimnasio, sauna y un aparcamiento de 117 plazas
La empresa adjudicataria se compromete a agilizar las obras para su finalización en un plazo de 15 meses
Arrancan las obras de vallado del conflictivo parque Wi-fi, cinco años después de aprobarlo el pleno
La plataforma de vecinos y comerciantes contra la gestión de Hila suma nuevas entidades y barrios
Palma rechaza el plan de modernización del aeropuerto que prevé Aena por el aumento de turistas
El Ayuntamiento de Palma ha adjudicado el que será el único equipamiento de relevancia que en dos legislaturas realizará el gobierno municipal de coalición de socialistas, nacionalistas y Unidas Podemos (UP): la construcción de las nuevas piscinas de S’Aigo Dolça en el barrio palmesano de El Terreno.
Así lo ha anunciado el portavoz del Ejecutivo municipal, Alberto Jarabo, en la rueda de prensa convocada tras la reunión de la Junta de Gobierno. La nueva instalación polideportiva tendrá un coste próximo a los 8,5 millones de euros y se prevé que su construcción esté lista en el primer trimestre de 2023, en las semanas previas a las elecciones de mayo de ese año electoral.
Prevé la construcción de una piscina cubierta, gimnasio, espacios polivalentes y un aparcamiento de 117 plazas, entre otras instalaciones. Se pondrá así fin, una vez construido el nuevo complejo, al estado de abandono y ruina del histórico recinto deportivo clausurado hace más de 40 años.
La financiación de esta obra procede de diferentes fuentes. El Consell de Mallorca aportará hasta 4 millones de euros, provenientes de la convocatoria de subvenciones 2020 para la reactivación económica por la crisis derivada del covid en materia de sostenibilidad y eficiencia urbana.
Otros 5,5 millones proceden de dos operaciones de crédito municipal, más una aportación adicional de los Fondos Europeos como beneficiarios de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible del denominado Plan Litoral de Poniente.
En principio, las obras arrancarán «de forma inminente, lo más pronto posible», tal y como afirmó Jarabo en rueda de prensa, y está previsto que duren en torno a 15 meses, tres meses menos de los 18 que estipulaba el pliego de contratación a instancias de la empresa adjudicataria de las mismas. Todo ello con el objetivo de poder certificar, en tiempo y forma, los plazos para la obtención de las subvenciones europeas e insulares comprometidas en esta construcción.
Con este complejo polideportivo, Palma recupera unas piscinas que fueron todo un referente en el mundo de la natación, entre los años 40 y 70 del siglo pasado, y sede del Club Natación Palma hasta la década de los 70.
El nuevo edificio será una instalación flexible con hasta siete espacios polivalentes, lo que permitirá que las principales actividades se desarrollen de forma independiente las unas de las otras: aparcamiento, restaurante, y centro deportivo.
El proyecto prevé la construcción de una piscina de 25 por 12 metros con seis carriles, solárium y una zona de saunas. Como elemento diferenciador, destaca la habilitación de un patio central a modo de símbolo y herencia de las casas mallorquinas. Será por ello un elemento estructurador del espacio, que además de aportar luz al edificio, permitirá la ventilación de la piscina en verano.
En total, la superficie útil es de 6.500 metros cuadrados repartidos en seis plantas escalonadas, cinco en altura, más sótano. La construcción incorporará prestaciones de eficiencia energética para un consumo casi nulo de energía. Será un edificio muy eficiente en este sentido con sistemas activos y pasivos de ahorro energético, con implantación de placas solares y sistemas de aprovechamiento de agua de lluvia y del subsuelo donde se asentará la construcción.